jueves, 25 de septiembre de 2008

SOY EL ÚLTIMO HABITANTE DEL PUEBLO

Soy de “Rompecastañas”, un pueblecito que está perdido en la montaña, a unos 1200 metros de altitud y que está situado en el pirineo aragonés.
Cuando era pequeño, en el pueblo había doce personas: seis abuelos, cuatro adultos y dos niños.
Para ir al colegio me tenía que desplazar hasta “Naranjuela” al pueblo del lado, allí nos encontrábamos con muchos amigos de todos los pueblos y manteníamos una buena relación.
Mi pueblo era muy bonito, lleno de prados, bosques y con una inmensa fauna. La mayoría de habitantes eran agricultores o ganaderos y en invierno se les hacia muy duro.
La gente del pueblo decidió bajarse a los pueblos más grandes de los alrededores, buscando más calidad de vida y trabajos mejores.

Hasta que un día me quedé solo. Yo no me quería cambiar de pueblo, porque allí tenía mi casa, mi trabajo, tenia mi granja.
Cada semana iba a comprar a “Naranjuela” para toda la semana, i de paso, veía a mis amigos de siempre.
Con los años me cansé de aquel pueblo tan solitario y decidí venderme la granja, para ir a vivir a otro pueblo. Quería encontrar una faena mejor i en la capital eso lo conseguí. Me dediqué a informático.
I en vacaciones pasaba unos días en “Rompecastañas” y en algún fin de semana para descansar.


Josep Molleví

1 comentario:

Teresa dijo...

Josep:
La redacción está muy bien. Quizá algo cortita,espero que las próximas las hagas algo más extensas porque escribes bien.
Has cometido alguna falta de ortografía pero sólo una se repite mucho y llama la atención: en castellano escribimos la conjunción "y" griega y no latina.
Otra cosa, "inmensa" quiere decir muy grande y tú en realidad querías decir que había mucha fauna, no que fuera muy grande, así que debes emplear "abundante, rica..."