jueves, 20 de noviembre de 2008

UN DÍA EN MI VIDA DENTRO DE 15 AÑOS

Yo me imagino dentro de 15 años como sería. Me imagino una persona madura y con las ideas muy claras.
En esa edad ya estaré trabajando en un trabajo que me guste y que me permita ganarme la vida.
Supongo que viviré con pareja y con hijos. Seguramente viviré en la Pobla de Segur, cerca de la familia.
Podría ser que jugase en el equipo amateur de mi pueblo.
Tendría un coche todoterreno de color negro para ir a la montaña.
Me gustaría tener un chalet con piscina, salón de billares y con una mesa de ping-pong.

Algún fin de semana iría a tomar algo con mis amigos en un Bar y recordaríamos anécdotas que nos pasaron cuando éramos más pequeños.
Todos nos sorprenderemos de lo cambiados que estaremos. Unos estarán más maduros que otros, todo dependerá de la suerte de cada uno, de la salud y de lo que nos prepara la vida.



Josep Molleví

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Un día en mi vida dentro de 15 años.

Suena el despertados, como casi siempre, a las 8 de la mañana. No tengo mucho tiempo, pero es suficiente. Mi novio se ha ido ya hace rato, pero yo no dejo que me despierte. Aiko aún duerme, la despierto todo lo suavemente que se deja, es una dormilona. La adoptemos hace ya unos años en Xina y, es irónico, que su nombre sea japonés. Salimos las dos juntas a la gran ciudad de Tokio, un montón de personas con los ojos alargados pasan por nuestro lado y nos miran raro.
La dejo en el colegio, bien vestida con su uniforme. Luego, corro por aquellas calles tan llenas hasta llegar al instituto donde trabajo... Llego tarde. Entro en la clase, llena de adolescentes japoneses, me hacen mucha gracia todos juntos. Me siento en la mesa hasta que se callan y le digo al chico del fondo que le estoy viendo el cómic que esta leyendo entre el libro de español.
Salgo de la clase riendo, el idioma les parece una cosa un tanto peculiar. “¡Ja! ¡Como si el vuestro fuera fácil!” Les digo yo, y, evidentemente, les parece lo más gracioso del mundo .
Aiko ya esta en casa cuando llego, Tom la ha ido a buscar. Él es español, el único que conocí una noche en un bar de Sibuya. Mientras prepara la cena juego con mi hija, pero me descuido un momento porqué algo de lo que dan en televisión me parece interesante, y, cuando me doy la vuelta, ha rallado la pared y el sofá... ¡es toda una artista!
Miramos la tele hasta las tantas, Aiko no tiene nunca sueño. Pero Tom es un pesado y la mete en la cama. Un rato después nos vamos nosotros, y, antes de dormirme, le pregunto a mi novio que día será nuestro próximo viaje.

De la rendija de la puerta salía una mancha de sangre.

Llegué a casa muy tarde aquel lunes, Marta me havia invitado a tomar algo y no me había atrevido a decirle que no. Mi hermana estaría muy enfadada conmigo.
Vivía con ella desde que estudiaba en Madrid, ella tenia un piso alquilado y, entre las dos, nos salía barato. Pero tenia sus inconvenientes, como por ejemplo el echo de que no me había sentido tan controlada en mi vida.
Abrí la puerta con cuidado, deseando que estuviera dormida, pero lo dejé por imposible cuando escuché la televisión. Caminé por el pasillo hasta llegar al comedor, pero no había nadie, el señor del telenoticias hablaba sin parar, pero nadie lo escuchaba. Oí el agua de la ducha y pensé que Ana se había olvidado de cerrar la tele, es tan descuidada...
Dejé mis cosas y me estiré en la cama, tenia esa sensación tan horrible de que algo se iba a torcer y el día iba a acabar mal. De pronto, escuché un ruido, como de una ventana abriéndose, y de cómo la ducha se cerraba, luego, un golpe, como de algo cayendo, y, muy seguido, un grito, de mi hermana.
Salí corriendo hacia al baño, pero llegué tarde, de la rendija de la puerta salía una mancha de sangre.

·Un día de mi vida dentro de 15 años

Me despierto a las 7 de la mañana para ir al trabajo. Antes de levantarme de la cama, giro la cabeza y veo a mi chico. Aunque llevamos 10 años juntos, no nos hemos casado porque los dos pensamos que si quieres a alguien, lo quieres con o sin papeles. Le doy un dulce beso para despertarle. Le encanta que le bese por las mañanas.
Antes de ir a la cocina, me dirijo a la habitación de mi vida. Mi muñeca, mi hija. Morena como su padre y de ojos grandes, como los de su madre. La visto con un bonito vestido color beige y unas bailarinas a conjunto.
Vamos a la cocina. Su padre le prepara el almuerzo. Una tostadita con jamón, como siempre. Yo le hago un vaso de leche con cacao. Le encanta el chocolate. Nosotros nos tomamos un café.
La niña y yo cogemos un coche para irnos al colegio. Él coge el otro para irse a la oficina.
La dejo en la clase de P-4, y me dirijo a tercero de ESO. Abro la puerta. Como siempre todos bien callados. Me respetan. Nos respetamos. Empiezo la clase de lengua extranjera con un simpático “Hello!”. Se divierten conmigo.
A las 5 cojo a mi pequeña y nos vamos un rato al parque de al lado. Cuando llegamos a casa, la niña va a jugar y yo ha hacer la cena. Verduritas para mantener la buena línea.
Llega mi corazón, cansado de trabajar. Pero me da un agradable beso. Tierno como de costumbre. Cenamos. Antes de ir a dormir, el padre le cuenta un cuento a su princesa para que se duerma.
Nos estiramos los dos en la cama. Nos damos 2 besos. Me da un abrazo y esperamos que llegue el siguiente, y aún mejor, día.

viernes, 7 de noviembre de 2008

DE LA RENDIJA DE LA PUERTA SALIA UNA MANCHA DE SANGRE...

Habíamos cogido el coche por la tarde, alrededor de las 8, para ir a un discurso que el día siguiente haría mi madre en Viengën. Era un trayecto largo y duro, ya que teníamos que pasar por un caminito muy estrecho e irregular. Empezó a llover alrededor de las 8 y media, cuando aún nos faltaban unas dos horas para llegar al hotel que la empresa de mi madre nos había facilitado. Primero solo eran gotitas, pero después empezó a diluviar, y el coche se nos quedó atascado en la cuneta.
Vimos un motel cerca, y decidimos quedarnos a dormir allí. Los amos del motel eran simpáticos, aunque un poco extraños. Empezamos a cenar, y al cabo de 15 minutos, mi madre se empezó a encontrar mal y subió a la habitación que habíamos alquilado. Yo seguí cenando sola. La verdad es que tenía mucha hambre.
Cuando fui a abrir la puerta de la habitación, vi salir de la rendija de la puerta una gran mancha de sangre… ¡mi madre estaba muerta! Abrí la puerta y vi que a mi madre se le había caído un poco de sangría al lado de la puerta…¬¬

jueves, 6 de noviembre de 2008

De la rendija de la puerta salió una mancha de sangre

Había un grupo de amigos que se fueron a la montaña a buscar setas. No habían ido nunca por eso tenían muchas ganas de ir.
Ya en la montaña, se ponían en caminos muy escondidos, que apenas podía pasar alguien. Iban subiendo montañas hacia arriba sin saber donde estaban.
Encontraron muchas y de diversas clases. Estaban muy orgullosos de haber encontrado tantas en el primer dia.
Pero, empezó a oscurecerse, era un día de noviembre a las siete de la tarde y no encontraban el camino de bajada. Estaban todos preguntándose: - ¿Y ahora que hacemos? -

Decidieron continuar caminando hasta que uno de ellos vio una luz de una casa y se dirigieron hacia ella. Pasaron mucho miedo cuando oyeron unos rugidos de animales. No sabían si eran osos, jabalís, ciervos o algún otro animal de la montaña.

Por fin llegaron a la casa, era un refugio en medio del bosque, donde algunos excursionistas o cazadores pasaban la noche. Tenían la chimenea encendida y estaban cenando. Entraron en el refugio y se pusieron a cenar tranquilamente. Uno de ellos nos dijo que se iba al lavabo pero
vio una mancha de sangre en la rendija de la puerta. !Ahhhh, que es esto! Los cazadores les dijieron que no se espantara que era sangre de jabalí que habían matado en aquel mismo día.


Josep Molleví

jueves, 23 de octubre de 2008

!Soy invisible!

A mí me gustaría ser invisible porque así podría ir a todos los sitios que me diera la gana sin que nadie me viera. Podría escuchar conversaciones privadas, hacer alguna broma graciosa, no pagaría nunca: en el cine, en el teatro, en un estadio de fútbol…

También iría a los supermercados y compraría de todo sin pagar, así las bolsas andarían solas hasta llegar a casa. Sería muy divertido ir a un Bar y servirme lo que yo quisiera. Jugando a fútbol sería un crack, haría todos los goles porque estaría solo.

La gente se volvería loca, vería cosas muy raras que andarían solas, pero al final el que me volvería loco sería yo.

En el Instituto me llevaría la playstation y jugaría casi todo el día. En los días de examen me pondría el libro en la mesa y me lo copiaría todo, también sería genial cogerle las soluciones al profesor.

Un fin de semana me iría con el AVE a Madrid, no pagaría nada y visitaría todos los museos de la ciudad.

Yo creo que lo mejor sería que todo el mundo te viera, porque si siempre fueras invisible sería muy aburrido, y así nos relacionaríamos mucho mejor. No haría falta esconderse de los demás porque de esta manera seríamos todos más honrados.


Josep Molleví

miércoles, 22 de octubre de 2008

¡Soy invisible!

¿No os gustaría ser invisibles? A mí sí, ¡me encantaría! Ir por ahí sin que nadie te viera... es lo que haríamos todos si fuéramos invisibles, ir desnudos por la calle, robar cosas sin que nadie te viera, entrar en casas ajenas, espiar a tus amigos, descubrir sus secretos, etc. Pero eso al final cansaría.
A mi no me gustaría por eso, al menos no principalmente. A mi me gustaría porque nadie me vería, porque nadie sabría quien soy, solo quien yo quisiera... porque si nadie te conoce nadie habla de ti, y de esa forma nadie te juzga.
No hablarían de “esa” que izo “eso” o que le gusta “eso otro”... la mayoría de persona se dejan llevar por las apariencias, y casi nunca somos lo que parecemos.

¡Haría lo que a mi me gustara y me vestiría como yo quisiera!
Libertad... eso es lo que significa para mí ser invisible.

Me levantaría y me iría al instituto, pero si un día me quedara dormida, nadie lo sabría, fingiría haber estado allí todo el tiempo. Podría incluso hacer novillos ¡y dormir en clase! Podría mirar a quien quisiera sin que se diera cuenta, y verían a mis amigas hablando solas, eso si seria divertido.
Aunque también tendría sus inconvenientes ser invisible siempre, porque nadie sabrí que aspecto tienes... Así que lo mejor sería poder ser invisible a medias, y no me refiero a ser mitad y mitad, hablo de poder hacerme invisible cuando yo quisiera, cuando tuviera vergüenza o para hacer alguna tontería.

Sí, creo que ser invisible sería muy pero que muy divertido.

Soy Invisible



Yo muchas veces e soñado que era invisible, y la verdad es que en algunos momentos de la vida me gustaría serlo. Como por ejemplo cuando estoy en casa y no ordeno mi habitación, o no me hago la cama por la mañana, no dejo la ropa sucia en el cuarto de la lavadora y entonces viene mi padre i me pega una bronca entonces es cuando a mí me gustaría ser invisible por que así mi padre no me podría decir nada de nada simplemente no me vería. Ho también en otros casos, como cuando estoy en el instituto y oigo niñas y niños que critican a las otros y si pudiera ser invisible nadie me criticaría, y así me ahorraría esos comentarios. Claro que ser invisible sólo me gustaría en algunos casos porque la verdad es que a mí ni a nadie, le gustaría que todo el mundo pasase de él o ella, puede llegar a ser muy duro que nadie conteste a tus preguntas cuando estas preguntando, o cuando te has hecho daño, que nadie te ayude.
A todo el mundo le gustaría ser invisible por las cosas malas i llevarse el merito de las cosas buenas.
La verdad no soy tan desordenada como cuento.


Lídia Gallart Mora

soy invisible

SOY INVISIBLE

Había una vez tres niños uno se llamaba Juan otro se llamaba José y el otro se llamaba Miquel y siempre se iban a jugar al parque y jugaban a fútbol y delante de aquel parque había una casa de un hombre que se cabreaba mucho si le lanzaban la pelota a su jardín porque tenía muchas flores muy bonitas. Un día quedaron los tres amigos para ir a jugar a fútbol al parque, Juan lanzó la pelota muy fuerte y la pelota se fue a el jardín de el hombre entonces el hombre salió con una escoba detrás de ellos pero al final se escaparon de el y cuando José miró el reloj era muy tarde y todos se fueron a casa. A la mañana siguiente quedaron y se fueron a jugar a fútbol y Miquel lanzó la pelota a la casa de el hombre y rompió un cristal y el hombre salió muy cabreado con una escoba y los tres amigos se pusieron a correr delante de el hombre y Juan iba delante del hombre y el hombre casi lo cogió pero Juan se volvió invisible y no los pudo coger.

sábado, 18 de octubre de 2008

SOY INVISIBLE

Un día soñé que era invisible. Soñé que me ponía una especie de capa como la de Harry Potter y que podía convertirme en “algo” invisible.
Cuando me ponía la capa me sentía indiferente. Sentía que estaba sola, cómo muerta; sin nada.
Me quedaba perpleja al ver cómo podía la gente ser tan asquerosa. Podía ver la habilidad que mis compañeros de clase tenían para criticar a los demás. Era capaz, y tenía la suerte, de poder saberlo todo sobre todos, pero eso, al mismo tiempo, me angustiaba muchísimo. No quería escuchar los centenares e incluso miles de insultos que salían, en dos simples minutitos, de sus bocas, aquellas que antes me parecían tan indefensas. Veía la verdad de las cosas, y no me gustaba nada.
Cuando hago algo malo, mi padre es el que me regaña; mi madre nunca opina sobre nada. Y me sorprendí también, al descubrirlo. Mi madre le daba instrucciones a mi padre, y luego era él el que daba la cara y se peleaba conmigo.
No solo vi eso. Lo vi TODO. Vi como funciona de verdad la política, el mercado, los negocios, los países, las culturas, las “democracias”… Vi como era realmente el mundo; y si tengo que decir verdad, me decepcionó bastante.

jueves, 9 de octubre de 2008

CÓMO LIGAR Y QUE FUNCIONE.

CÓMO LIGAR Y QUE FUNCIONE.



La mejor manera de ligar y que funcione durante mucho tiempo es ser uno mismo, porque si finges ser lo que no eres, tarde o temprano acabará mal. Esto es lo principal, y a partir de aquí hay que usara todos los trucos y tácticas que pueden ayudarnos a que el resultado sea perfecto.
Hay que ir limpio y arreglado y hay que ser amable y educado.
Hay que mirar cuál es la persona que más puede adaptarse a nuestra manera de ser y probar suerte. Primero podemos acercarnos y presentarnos con alguna excusa como por ejemplo preguntar qué hora es. Si vemos que está dispuesto a conversar, y nos ha gustado como ha reaccionado, podemos continuar hablando, preguntando si estudia, de dónde es, etc.
Si la cosa va bien, podemos quedar otro día para ir a pasear en bicicleta, para ir al cine, para ir a hacer alguna excursión, o simplemente para volver a hablar otro rato.
Si después de estas citas, os encontráis bien el uno con el otro, seguramente podréis decir que habéis encontrado pareja o alguien especial con quien vale la pena intentar algo.
Así pues, todas estas cosas y muchas otras por el estilo, son las que se pueden hacer para ligar.




Laia Arilla

Como ligar y que funcione

¡Ligar es difícil! las matemáticas son fáciles.
Yo como mucho te voy a explicar la mitad,el primer paso se trata de elegir a la persona a quien quieres amar, alguien que te caiga bien, que te ayude cuando te pase algo malo, que se sacrifiqué por ti y que dé gusto de ver. En el segundo paso yo me lío, no sé que hacen, se empiezan a abrazar, miradas peligrosas y palabras que no había oído en mi vida! Pero esto sin salir juntos. De este paso sé dos cosas: hablar con ella y hacerla reír y el segundo, que es el más aburrido, es que ella hable, pero te lo puedes pasar bien, mientras pones cara de interesado y piensas en porque perdió el Barça, porque ocho rima con bizcocho y porque los que beben Heineken piensan en verde. El tercero me imagino que es salir con ella, pero el paso que sé, es el cuarto: ¡Siempre acaba mal! (casi siempre, hay algunos que han tenido suerte) Por mí que el manual de ligar está mal hecho. A mí, esto de ligar, nunca se me ha dado bien, no se me da bien y nunca se me dará bien.

Joan Gordó

Como ligar y que funcione:


Lo que tienes que hacer primero que todo es buscarte a alguien que te guste, porque lo encuentras interesante, porque te hace reir, porque te ayuda con tus problemas. Culquier cosa. La persona que tu eliges puede ser quien tu quieras sea como sea alto, bajo, rubio, moreno, gordo, flaco endefinitiba como tu quieras. Pero lo que verdaderamente importa es que esa persona la hayas elegido tú.
Te tienes que acercar a esa persona,comportarte como un buen amigo pero no mucho tiempo ya que puede ser que la otra persona se piense que tu sólo quieres ser amigos, asi que le tienes que demostrar que hay algo más que amistad, como por ejemplo si esta triste abrazarle, darle un beso, que él pueda ver que tu quieres algo más que una simple amistad.
Si tus tacticitats funcionan felicidades los has casi conseguido solo te faltan pequeños detalles como pequeñas miradas, reirte, te tienes que ir acostándote a él y puede que al final funcione.
No siempre algo que te funciono pueda volver a funcionar ya que cada vez es distinto. Como ligar es cosa de cada persona no hay ni muchisimo menos un manual de instrucciones.
Lidia

miércoles, 8 de octubre de 2008

Cómo ligar y que funcione

Primero tienes que hacerte el interesante, un poco el chulo, gastarle alguna broma y hacerla reír un poco.
La mirada es muy importante, si estás muy serio se espantan y si ríes demasiado pareces tonto. Tienes que hacer una mirada misteriosa e interesante, disimulando un poco que no vea que vas detrás. Si no, las aburres y te dicen que eres un pesado. Es muy importante ser respetuoso, tratarlas bien, saber escucharlas, decirles palabras bonitas, invitarlas a tomar algo, a cenar, a pasear o ir al cine.
Cuando la tienes enamorada le das una abrazada, le coges la mano, le llamas por teléfono, le das un beso y le cuentas cosas que te pasen,
Si todo esto no funciona es que no es tu chica ideal y necesitas buscar otra mejor, más comprensible y que nos entandamos mejor.
Lo más importante es conocer su personalidad, su carácter, su sensibilidad, su bondad y su sinceridad. Si todo esto te gusta de ella es que te has enamorado de ella, y vale la pena
conquistarla.
Josep Molleví

Como ligar y que funcione:

Ligar es fácil, o acostumbra a serlo, pero que funcione o no es otra cosa.
Primero, debes elegir a alguien, alguien que simplemente te guste, porque te hace reir, porque es guapo/a, porque lo sientes tu o por que sí... Puede ser quien tu quieras, chico o chica, alto o bajo, gordo o flaco... Solo hay una norma para esto, y es que seas tu quien la escoja.
Después, lo mejor es que te hagas su amigo/a, pero, si quieres un consejo, ve con la verdad por delante, quiero decir, que no parezca que solo quieres ser un amigo/a, sino que se noten tus intenciones, aunque solo sea un poco.
A partir de aquí, según sus acciones, veras perfectamente si quiere algo o no contigo, si notas que no, lo mejor seria olvidarlo, aunque no siempre es tan fácil.
Si notas que sí; ¡enhorabuena! Sigue adelante. Lanzale alguna mirada complize, dile algo bonito de tanto en tanto y estés a su lado siempre que lo necesite... quizás esto ultimo parece la descripción de un amigo, y realmente lo es, pero, si en lugar de palabras de animo cuando esta triste, te atreves a abrazarle/ao ha darle un beso en la mejilla, las cosas cambian.
Ahora tienes que hablar con él (o con ella) i contarle tus sentimientos, también puedes lanzarte directamente, pero eso tiene menos probabilidades de funcionar, además, de esa forma no entiendes los sentimientos del otro/a.
Hasta aquí puedo leer... Ligar es cosa tuya y no existe un modo 100% eficaz, ni mucho menos... que funcione depende de ti (y de la otra persona claro)!

jueves, 25 de septiembre de 2008

SOY EL ÚLTIMO HABITANTE DEL PUEBLO

Soy de “Rompecastañas”, un pueblecito que está perdido en la montaña, a unos 1200 metros de altitud y que está situado en el pirineo aragonés.
Cuando era pequeño, en el pueblo había doce personas: seis abuelos, cuatro adultos y dos niños.
Para ir al colegio me tenía que desplazar hasta “Naranjuela” al pueblo del lado, allí nos encontrábamos con muchos amigos de todos los pueblos y manteníamos una buena relación.
Mi pueblo era muy bonito, lleno de prados, bosques y con una inmensa fauna. La mayoría de habitantes eran agricultores o ganaderos y en invierno se les hacia muy duro.
La gente del pueblo decidió bajarse a los pueblos más grandes de los alrededores, buscando más calidad de vida y trabajos mejores.

Hasta que un día me quedé solo. Yo no me quería cambiar de pueblo, porque allí tenía mi casa, mi trabajo, tenia mi granja.
Cada semana iba a comprar a “Naranjuela” para toda la semana, i de paso, veía a mis amigos de siempre.
Con los años me cansé de aquel pueblo tan solitario y decidí venderme la granja, para ir a vivir a otro pueblo. Quería encontrar una faena mejor i en la capital eso lo conseguí. Me dediqué a informático.
I en vacaciones pasaba unos días en “Rompecastañas” y en algún fin de semana para descansar.


Josep Molleví

Soy el último habitante del pueblo

Todo lo bueno dura poco, como mi pueblo. Desde que pusieron esas dichosas industrias y el vertedero cerca de nuestras casas nos ha convertido en el peor pueblo de España. No hay paisaje, delante de mi casa hay una montaña que, más bien, parece la duna de un desierto. Nos han quitado todo lo bueno que teníamos, bonitos paisajes, un olor fresco y agradable y el cielo azul. Y lo que anteriormente era las afueras del pueblo, hoy en día es el centro del pueblo, lo único que se ve, es el campanar, las grúas de las obras, la montaña desértica y una enorme nube que nunca se va de ahí. Pero esto no es todo, el cambio climático han hecho que se viva una calor extraordinaria, enero parece marzo, marzo parece junio y el verano dura seis meses. La gente del pueblo no lo han aguantado más y se han ido todos hacia el norte para disfrutar de las épocas del año. Pero aunque sea un pueblo fantasma, contaminado y caluroso, es mi pueblo.
Pero yo no me voy a ir, voy a morir dónde he nacido y he vivido.


Joan Gordó

Soy el último habitante del pueblo...

Soy el último habitante del pueblo...

A las 11:30 de la noche me fuí a dormir cómo todos los días, pero esa noche tuve un sueño muy extraño.
Soñé que en mi pueblo solo quedaba con vida una sola persona y esa era yo...
Solo de pensar que era la última habitante del pueblo me ponía enferma, pero por otra parte podía ser hasta divertido porque haría lo que me diese la gana y me podría colar en las casas de los otros, prodiga gritar y nadie me diría nada ya que simplemente no había nadie más. Empece a colarme a distintas casas recorrien todo el pueblo hasta haber visitado todas las casas, pero al cabo de un rato me di cuenta que eso no estaba bien y me hacía muchas preguntas cómo por ejemplo:
¿Donde estaban todos?¿Donde estaba mí familia?¿Porque habían desaparecido todos? No entemada nada de nada, los busque por todos solada y no vi ni una alma en vida, me empece a preocupar porque lo sucedido no podía ser de ninguna manera, eso no tenía lógica. Entonces intente de llamar a mi padre pero no contestaba, lo intente con los otros pero tampoco responian. Empece a ponerme nerviosa y al mismo tiempo un poco triste ya que podía ser que no volviese a ver al resto del pueblo y sobretodo mi querida familia.
Note algo que me llamaba y me tocaba la espalda y de golpe me desperte, era mí padre que me decía que me levantase que tenía que ir al colegio, y eso fué todo de ese terrible sueño el cual nunca voy a olvidar.

Lidia Gallart

SOY EL ÚLTIMO HABITANTE DEL PUEBLO

Desde hace más o menos un año, estoy viviendo solo en un pueblo llamado La Pobla de Segur.
Siempre q querido estar solo pro no tanto. Salgo a la calle i el único ruido q se oye, son mis zapatos tocando el suelo. Me fui de Barcelona, para estar en algún lugar si mucho ruido, sin mucha gente, sin contaminación. Encontré este pueblo. Todo lo que avía soñado, lo encontré allí.
Al pasar un tiempo, vi que poco a poco quedaba menos gente, y al final, me quede solo.
Al principio se estaba genial, poco a poco ibas conociendo a gente, hasta q al despertar una mañana, vi q el último habitante de este pueblo era yo.
Noto un gran vacío dentro de mí, siento como si el mundo huyera de mí.
Al salir a la calle, doy una vuelta por todo el pueblo, cojo el coche i me voy hasta otro pueblo a comprar comida, vuelvo a casa y me pongo a mirar la televisión.
¿Qué haríais vosotros si os despertáis una mañana solos en un pueblo?
Estando con gente, el pueblo se te hace pequeño pero al estar solo, es inmenso. Si pudiera pedir un deseo, pediría volver al pasado. Volver a estar con gente como antes.

Júlia Piera!

Soy el último habitante del pueblo.

Hoy, por fin, es sábado. No tengo ninguna prisa en levantarme, pero algo me inquieta... Todo está en silencio, no se oye nada, a parte del sonido de mi respiración. Decido levantarme, ya no podría dormir.
Mi casa está vacía. Supongo que se habrán ido a comprar, no seria tan extraño... Voy a la cocina y enciendo el televisor, pero no se ve nada, un montón de rallas grises invaden la pantalla y se oye un ruido molesto. Entonces, recuerdo la tormenta de la noche anterior, había llovido muchísimo y los estruendosos relámpagos apagaron las luces de todas las casas.

-Seguro que se ha estropeado la antena o algo así...- Pienso en voz alta, y me da la impresión de estar muy sola.

Paseo por la casa una y otra vez, sin saber que hacer. Los electrodomésticos no van y ni siquiera he conseguido calentarme una baso de leche... El reloj de cuco de mi abuela marca las doce y, agobiada, decido salir a dar un paseo.

Bajo las escaleras rápido, esperando encontrar a alguien en la calle y que se me quite la angustia. Y, al llegar a bajo, me invade el miedo... Estoy completamente sola, no se ve a nadie, las tiendas están cerradas, el suelo húmedo y el cielo tapado.

-No pasa nada...- Me digo, poco convencida. Voy al parque, allí tiene que haber alguien... Pero no, el frío viento me hiela por dentro, estoy sola...

Voy por todas partes, esperando encontrar una señal de vida humana, pero lo más parecido a eso son los perros vagabundos. Mis amigas no contestan al teléfono y mamá y papá no han vuelto a casa todavía.

Pasan las horas, pero me pasan como si fueran años. El reloj vuelve a tocar justo cuando abro la puerta de casa: son las 5 de la tarde y estoy hambrienta. Justo entonces suena el teléfono, y corro hacia él muy contenta.

-.¿...Sí...?- Tartamudeo yo.

-¿Te sientes sola?- Me sorprendo, no se quien habla, parece una voz de película de terror, de fantasma... resuena en mi cabeza y me angustio por momentos. -... eres el ultimo humano de la tierra, y ni siquiera yo se porqué... pobre chica... sola en un mundo tan grande... ¿no preferirías morir?-

-¿Quién eres?- Pregunto yo, asustada.

-Nadie...- Oigo una risa.

Al oír esto me pongo a llorar, ya no aguanto más, si es una broma, no tiene ninguna gracia.

-¿¡Quien eres y que quieres de mí!? ¡Contesta!- Pero solo oigo el pitido del teléfono, ha colgado.
Me caigo al suelo, estoy sola y no se que hacer... Todo se vuelve oscuro y tengo la impresión de estar volando.

Un sonido muy lejano que se hace cada vez más fuerte. ¿El despertador?

Abro los ojos y oigo a mi madre gritarle a mi hermana ¿había sido un seño?. Me levanto de un golpe y voy hacia ellas, contenta de nuevo. Abrazo a mi hermana para asegurarme de que es real y, por fin, mi vida vuelve a la normalidad.

Pero aun así, a veces, cuando pienso en el sueño que tuve, oigo la voz del teléfono en mi cabeza, haciéndome cada vez la misma pregunta: ¿cuál es el sueño?...

viernes, 19 de septiembre de 2008

· Soy el último habitante del pueblo

Eran las ocho y siete de la mañana de un día gris y frío. Me acababa de despertar. No oía nada, ni el simple microondas calentando la manzanilla que, todas las mañanas sin falta, se tomaba mi madre; ni tampoco el ruido del teclado del ordenador de mi padre, que ya temprano se ponía a trabajar.
Me levanté. Miré al despacho de mi padre y no había nadie, solo el ordenador encendido. Pensé que quizás estarían desayunando. Miré en la cocina, pero no había ni una sola alma. Podrían estar en el jardín tomando el café, pero tampoco estaban. Mire sala por sala, y no vi ni a mi padre ni a mi madre.
Salí a la calle y tampoco vi a nadie. Normalmente, a esas horas de la mañana, ya estaba casi todo el mundo en marcha. No oía un triste ruido; solo los pájaros y el viento silbando. Me asomé al quiosco del lado de mi casa que siempre estaba abarrotado de gente. Me sorprendí mucho al no ver a nadie, y más aún cuando me di cuenta que las luces estaban encendidas. Me estuve media hora dando vueltas alrededor del pueblo, y no vi absolutamente a nadie.
No sabía que estaba pasando, estaba totalmente desconcertado; solo sabía que me encontraba solo en el pueblo.

martes, 16 de septiembre de 2008

¡BIENVENIDOS!


Este va a ser el blog en el que colgaréis vuestras redacciones y también un medio a través del cual podremos estar en contacto fuera del aula .
En este blog incluiré también todo aquello que encuentre por internet y que piense que puede seros útil en vuestro trabajo.
Como el blog es "nuestro" espero que colaboréis en su crecimiento pero también en su formación, de manera que, si alguna cosa del diseño no os gusta, podéis hacer sugerencias de cambios que serán bien recibidas.